Claves para invertir sin caer en los errores del pasado
Aprende a desentrañar la psicología del mercado analizando el comportamiento de los precios
Pablo Gil (@PabloGilTrader) pone al servicio del inversor novel sus más de treinta y cinco años de experiencia gestionando activos financieros. Y lo hace con un original enfoque y con un estilo fresco que no se encuentra en los libros académicos.
Este libro dota al lector de unas herramientas sencillas para familiarizarse con la perspectiva de la psicología del inversor. Porque aunque el precio de cualquier activo se encuentra siempre afectado por factores macroeconómicos, hay una variable que llega a importar más que cualquier otra: las expectativas en la mente de los inversores. Unas expectativas determinadas por factores psicológicos que se retroalimentan dando lugar a las oportunidades de inversión más importantes a largo plazo, y que suelen concluir creando grandes «burbujas alcistas» o «crisis de pánico» cuando finalmente explotan.
Con un doble análisis técnico y macro, Pablo Gil enseña a detectar excesos al alza y a la baja en la valoración de activos como la bolsa, los bonos o las materias primas, y cómo esos cambios en las expectativas apuntan a cambios de tendencia. En estas páginas aprenderás a interpretar un gráfico de precios, auténtico termómetro que revela las mutaciones en el sentimiento en el mercado que a la postre genera la sustitución de expectativas positivas por unas negativas y viceversa.
El método está basado en su experiencia personal a lo largo de las grandes crisis financieras de las últimas cuatro décadas que ha tenido que gestionar, como el «lunes negro» de 1987, la crisis de la burbuja de las «.com» de 2001, la crisis financiera tras la explosión de la burbuja inmobiliaria de 2007 o la crisis desatada por la pandemia de COVID.
El autor nos brinda instrumentos para identificar los factores comunes que suelen estar presentes en cada una de esas antesalas a la destrucción de capital. Porque podemos aprender de las crisis anteriores, y maximizar la gestión monetaria de nuestras inversiones, no sólo analizando la situación macroeconómica que acompañaba esos momentos históricos, sino también descubriendo el clima colectivo de opinión de los inversores que alimenta los miedos durante las peores crisis.